Ir al contenido principal

una noche cualquiera

Recuerdo haberlo invitado a la fiesta pensando en nada... ¿quién eras? no me importaba, sólo me gustaba la forma en como me veias al hablarte o quizás solo imagine que me mirabas tiernamente.

Líneas con sangre seca, mejilla izquierda hinchada, cinco puntadas. Pensaba que tal vez lo olvidaría algun día... Imposible, el día en que durmieron juntos por vez primera no lo olvidaría por cierta herida en el rostro o Por no querer aceptar que en realidad no borraría de su mente ese recuerdo porque él había llegado a su vida.

Cuando regrese con un parche que cubría la mitad de mi cara seguías ahí. Platicamos y fumamos mariguana, en algun momento sentí que estabamos en sincronía.

Alcohol, mota, algun dolor escondido tras la llegada del viajero, tal vez ella lo usaría para ocultar un rechazo, algun desamor. Había llovido.Salieron de la casa y caminaron en busca del oxxo más cercano. De regreso un auto levanto un gran charco de agua y lo mojo.

Dormimos juntos en una cama angosta mientras tu olor se insmiscuia inevitablemente por mi nariz. No nos besamos. Fue agradable dormir contigo.

-¿Hace cuánto de eso?- Le pregunta el hombre a ella.
Quizás él no lo adivina, ni lo intuye, tal vez ni lo sabe. Ella podría decirle hace cuánto, la fecha exacta, pero ¿acaso importa?

Comentarios

niño machete dijo…
1. Si la carta de Hugo "adios Nena" no llego, por casi nada, a ser un insulto a Bukowski, esta por unanimidad sí.
2. No digo que la carta de aquel putete sea menos puñetera.
3. Ni pedo, agua y ajo...
elemea dijo…
niño machete: en realidad esta no pretende ser una carta, tampoco un elogio al gran Bukowski ni en cuanto a temática y mucho menos en cuanto al estilo. Simplemente es un poco de cursileria barata -para variar- y sí, es una historia puñetera escrita por una puñe.

Entradas más populares de este blog

De la exégesis del sueño (a la luz de Deleuze y Pink Floyd)

No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió... Sabina Aconteció la vida juntos. La otredad dejó de ser extraña para volverse familiar, necesaria. Como siempre, cometí actos fallidos. Mi afición por encubrir esa perentoria necesidad que tiene el deseo de manifestarse a costa del infame dolor que pueda generar, hizo traicionar mi propia voluntad, cuando en realidad lo único que me hubiera gustado hacer era sentarme en tus piernas y besarte, interminablemente. El sueño lo descubrió todo, ¿por qué incluso en el sueño era capaz de traicionar el deseo puro, libre de máscaras? La costumbre de evadir una destrucción. Sin embargo ahí está el sueño y su naturaleza profética. Si no para la vida en vigilia, si para la vida que transcurre en el sueño, en donde también soy. Despierto un segundo y vuelvo al sueño, apareces de nuevo en él, en la cotidianidad de los días por venir. Traes un suéter anaranjado, el pelo te ha crecido y me saludas con una gran sonrisa.  Un par de...

Los motivos del caníbal

La primera parte de mi último artículo en la maravillosa PENUMBRIA http://www.penumbria.net/los-motivos-del-canibal-i/ Disfrútenla! ROLAND TOPOR

Sobre el Lobo estepario de Hermann Hesse

Debo admitir que de no ser una lectura necesaria para el estudio de la novela moderna jamás, o al menos eso creo, la hubiera intentado leer de nuevo. La novela se compone de tres partes: la primera, es la introducción escrita por un desconocido del que nada sabemos, salvo que es un buen ciudadano con costumbres burguesas,  una persona ordinaria que no gusta de las complicaciones, vive en armonía con su espíritu puesto que ha decidido no oscilar entre los extremos del vicio o la santidad y mantenerse en el centro de la estabilidad, también aburrimiento -pero esto es algo que él mismo no se cuestiona-, entonces, ¿qué de importante tiene reparar en este personaje del cual jamás se escribirá una novela? (O quizás sí, si se convirtiera en cucaracha), acaso la única razón es la de ser el sobrino de la casera de Harry Haller (el protagonista de esta historia), con quien entabló cierta amistad. De tan íntimo, el escrito recuerda al género epistolar, a través del cual nos acercamos a la ex...